martes, 19 de enero de 2016

Día 2

Salmos 2:8 Pídeme, y te daré por herencia las naciones, Y como posesión tuya los confines de la tierra.

Cuando se trata de pedir sobre todo a Dios no podemos ser limitados. Por lo general cuando oramos lo hacemos pensando más en nuestras circunstancias, que en la grandeza del Dios que tenemos. Si Dios puede darte naciones acaso no puede darte lo que tú necesitas en este momento de tu vida, para ti puede ser imposible pero no para nuestro Dios. Deja ya de pensar en poco y piensa en grande.

No hay comentarios:

Publicar un comentario