Un nuevo año
Salmos: 65:11
Tú coronas el año con tus bienes,Y tus nubes destilan grosura.
Introducción:
La certeza que la palabra de Dios nos da es que nuestro año nuevo estará coronado de bienes, no espere lo malo, crea por lo bueno. Si estamos en Cristo y lo buscamos seguramente tendremos un buen año.
I. ¿Qué debemos hacer al entrar en un nuevo año?
1. Evaluar nuestros aciertos y errores, seguramente no todo lo que hicimos fue bueno o fue malo. Para saber a dónde ir hay que saber dónde estamos.
2. Rectificar lo malo que hemos hecho.
Se dice que el errar es de humanos y rectificar es de sabios. Lo más triste de la historia es no aprender de la historia.
3. Fortalecer las áreas en las que hemos fracasado.
Debemos planificar para no fracasar en lo mismo, si no fortalecemos nuestras áreas débiles seguiremos fracasando por lo mismo.
4. Debemos darnos la oportunidad de tener un nuevo comienzo.
Mientras tengamos vida podemos comenzar de nuevo, vuelva a intentarlo no se rinda Dios promete hacer algo nuevo con su vida.
II. ¿Cómo debemos enfrentar el nuevo año?
1. Con nuevas metas.
Las metas le dan rumbo a nuestras acciones, las metas son declaraciones de fe; de lo que pretende lograr con la ayuda de Dios. Si no tenemos metas terminaremos el año cansados y sin saber lo que hemos logrado.
2. Con nuevas expectativas.
Expectativa: esperanza de conseguir una cosa.
Si no tiene esperanza para su mañana no tiene poder en su presente. Renueve su fe en las promesas de Dios, Él es fiel.
3. Con nuevas actitudes.
Deshágase de las malas actitudes, decida no reaccionar de la misma forma frente a las circunstancias de la vida. Decida ser positivo, amable, alegre y agradecido.
4. Con nuevos compromisos.
Si no se compromete con nada no alcanzara nada, comprométase con lo que trasciende el tiempo.
Conclusión:
Filipenses 3:12-14; Job 8:5-7; Jeremías 29:11
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